Una reforma de baño barata requiere una cierta inversión que conviene sopesar a fondo antes de lanzarse a por una ganga o, por el contrario, dedicar más recursos de los necesarios movidos por el miedo a que lo barato salga caro. Por ello, hemos preguntado a varios expertos para que nos den un precio medio orientativo sobre las reformas integrales de cuartos de baño.
Aunque hay muchas variables que influyen el precio final de las reformas de baños, hemos pedido a varios expertos que estimen un precio orientativo para una reforma de baño integral, de manera que podamos ir haciéndonos una idea de a qué nos enfrentamos.
Si estás pensando en cambiar la bañera por un plato de ducha, aquí te revelamos cuestiones prácticas, un presupuesto aproximado, y el tiempo que tendrás que invertir en este cambio
Pidenos presupuesto
Lo primero a tomar en cuenta es que vas a vaciar parte del espacio y tendrás que picar azulejo, por tanto, quitar bañera y poner ducha implica, estéticamente, tener que elegir tres cosas:
Lo segundo es que no basta con saber cómo cambiar bañera por plato de ducha; para realizar esta reforma, necesitar gran cantidad de las siguientes herramientas:
Como puedes observar, necesitas bastantes herramientas para llevar a cabo la reforma. Después de tenerlo todo, aunque puede que ya lo tengas, solo necesitas saber cómo colocar un plato de ducha.
A continuación, te proporcionamos una guía sencilla y completa paso a paso para que puedas cambiar bañera por plato de ducha. Pon mucha atención y que comience la reforma:
La primera consideración es muy sencilla a la par que importante, cortar la llave general del paso del agua. Obviamente, vas a tener que manipular tuberías por lo que es necesario que la cierres si no quieres inundar tu aseo, así que creemos que es mejor recordarlo, ahora sí, ¡a trabajar!
Si te aseguras que ya no sale ni una gota del grifo, es hora de retirarlos para que trabajes con comodidad. Si tienes flexo para la alcachofa, quítalo primero. Después, con una llave, retira las tuercas de los mandos para sacarlo de la pared.
Como cuentas con las herramientas idóneas, quita el anclaje del desagüe con un destornillador y retira la pletina.
Este puede ser el paso más cansado y divertido para cambiar bañera por plato de ducha: ¡picar! Eso sí, sabemos que dar golpes puede ser algo relajante pero no te pases de fuerza. Con un mazo y un cortafríos da golpes a los azulejos que cubren tu bañera. Te resultará más fácil hacerlo por los bordes donde está la lechada.
También tendrás que quitar el ladrillo que recubre la bañera y los azulejos que queden por encima de los rebordes, de modo que puedas sacarla con más facilidad. Una vez que quede suelta, puedes llevarla a tu punto de reciclaje.
Ten en cuenta que tendrás que retirar azulejos a necesidad, es decir, tienes que prever hasta dónde necesitas quitarlos. En tu caso, si por ejemplo vas a usar los que tenías guardados, quizá solo necesites eliminar los del bode de la bañera. Si has decidido cambiar toda esa pared, sique picando con cuidado de no romper o dañar los de las paredes contiguas.
La grifería de una ducha es siempre más alta que la de una bañera, así que, antes de colocar plato de ducha, tendrás que adaptar la altura de la toma. Aunque mantengas el mismo grifo, te recomiendo cambiarlo de posición, de modo que no tengas que agacharte para poder dar el agua. Lo que queremos con el cambio de bañera por plato de ducha es ganar comodidad.
Primero mide por dónde van a subir tus tuberías, marca la altura adecuada y haz rozas en el ladrillo para dejar el espacio adecuado a las nuevas cañerías. Después, tendrás que cortar los codos de la anterior toma de agua con una pequeña radial.
Mide la nueva distancia que tendrá tu grifo para poder cortar los nuevos tubos que ascenderán por la pared para ambas tuberías. Luego, tendremos que encajarlos:
Luego, sigue el mismo procedimiento con el otro tubo. Recuerda que el decapante es importante porque de este modo el manguito quedará bien soldado a la tubería y evitarás escapes de agua.
Otro de los factores trascendentales a la hora de saber cómo cambiar la bañera por un plato de ducha es que seguramente el desagüe no coincida en posición. Esto hará que tengas que cuadrar el anterior con el nuevo a través de un codo de PVC.
Para saber dónde irá el nuevo desagüe coloca el plato de ducha en la posición ideal y haz la señal en el suelo de la nueva posición con tu lápiz marcador. Retira de nuevo el plato con cuidado de no romperlo.
Mide la distancia para después poner la nueva tubería a dicha distancia adecuada e instálale el nuevo codo y la válvula de desagüe. Tenlo limpio antes de aplicar una capa de cola para evitar fugas.
Quizá en este punto hayas tenido que alisar el suelo dándole una capa de mortero. Asegúrate que todo queda bien recto con el nivel antes de instalar el plato de ducha.
Cuando tus tuberías estén instaladas y, si has tenido que aplicar mortero, cuando esté seco, es hora de colocar el plato de ducha. Primero tienes que extender el adhesivo por el suelo y el plato de ducha, aplicando varias líneas de producto.
Después, presenta el plato en su espacio y haz que encaje a la perfección. Asegúrate que esté nivelado, porque el siguiente paso es poner las piezas del nuevo desagüe. No te olvides de poner ninguna junta para asegurar la estanqueidad del mismo y apretar bien todos los tornillos.
Una vez que el plato está colocado en su sitio es hora de alicatar con los azulejos que hayas elegido. Es importante que protejas el plato de ducha por dos razones: la suciedad y algún posible golpe.
Lo mejor es ponerle algún cartón encima porque además así puedes pisar con total comodidad y este, por ejemplo, puede amortiguar el golpe de algún azulejo que se caiga.
Pon la capa de mortero con la paleta dentada y empieza a colocar los nuevos azulejos desde la capa anterior hasta el plato de ducha pues, en caso de que tengas que cortar alguno, es mejor que estén a ras de suelo.
Limpia los posibles restos y deja secar al menos durante un día y luego aplica lechada a los azulejos del color que prefieras, de este modo quedarán bien sellados y además estéticamente bien presentados. De nuevo, deja secar la nueva capa de lechada, limpia la suciedad restante y… ¡ya sabes cómo cambiar la bañera por un plato de ducha!
¿Te ha parecido complicado cambiar la bañera por un plato de ducha? Como decíamos al principio es un trabajo sencillo si ya estás familiarizado con este tipo de labores; de lo contrario, es mejor que pidas ayuda a un profesional.